Cuando se decretó el estado de alarma pensé "voy a aprovechar estos días para adelantar en el blog, cocinar, editar y dejar muchas entradas programadas", pero la verdad es que lo único que he hecho ha sido cocinar, y más bien cocinar por obligación.
He estado bastante desganada y apática, pero ayer me levanté con ganas de hacer pan, ya que para cenar teníamos huevos fritos con patatas, la comida favorita de mi marido, y como estamos llevando el confinamiento a rajatabla (sólo sale él cuando nos quedamos sin comida) no era plan de salir solo a por el pan, algo indispensable en la cena de ayer. Así que me puse manos a la obra y el resultado fue un pan riquísimo, con corteza crujiente y miga esponjosa.
Vamos a por la receta!
Ingredientes:
350 gr. de Harina de fuerza100 gr. de Harina de trigo (de todo uso)
50 gr. de Harina integral
10 gr. de Levadura fresca
320 gr. de Agua mineral
2 c/c de sal
1/2 c/c de azúcar
Mezclamos los tres tipos de harina en un bol grande y reservamos.
En un bol ponemos 2 cucharadas soperas de la mezcla de harinas y en ella desmigamos la levadura. Añadimos ahora el azúcar y un poco de agua tibia (unas 5 cucharadas soperas) y mezclamos bien. Dejamos reposar la mezcla 30 minutos. Doblará su tamaño y quedará espumosa.
Formamos un volcán con la mezcla de harinas que teníamos reservada en el bol grande, y añadimos el resto de agua (tibia), la sal y la mezcla anterior. Vamos mezclando de dentro hacia fuera, yo siempre empiezo con una lengua de silicona.
Amasamos hasta que se mezclen los ingredientes, queda una masa más bien pegajosa. Dejamos reposar tapada durante 90 minutos.
Desgasificamos y amasamos de nuevo, le damos ahora la forma que tendrá nuestro pan y lo colocamos en una bandeja de horno, sobre papel sulfurizado. Le hacemos unos cortes arriba y espolvoreamos con harina.
Dejamos reposar otros 90 minutos.
Precalentamos el horno a 250º, calor arriba y abajo, poniendo una bandeja abajo o un recipiente.
Cuando el horno esté caliente, metemos la bandeja del pan y en el recipiente que habíamos dejado abajo echamos agua, para que genere vapor, cerramos rápido el horno y horneamos 10 minutos.
Retiramos el recipiente de agua y bajamos la temperatura a 200º, calor arriba y abajo, horneamos 25 minutos más.
Dejamos enfriar el pan en una rejilla unos minutos.
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