Algo sobre Mantequera de Tineo
Es una empresa asturiana que desde 1920 se dedica a la elaboración de mantequilla, siguiendo un proceso artesanal. Es fiel a la filosiflia del amor por la verdadera mantequilla, teniendo una cuidadosa selección de la materia prima. A diferencia de otras marcas, ellos han preservado el proceso artesanal de sus productos, incorporando las más novedosas tecnologías para obtener un producto de altísima calidad con la receta tradicional, usando como principal envase la lata, que permite mantener el sabor y el aroma de la mantequilla sin alterarlo
Podemos encontrar la Mantequilla Imperial en una amplia variedad de formatos: Lata, rulo o pastilla, desde 250 gr hasta 5 kg.
Pero ¿qué es realmente la mantequilla? Pues es el resultado de separar la nata de la leche entera de vaca. Una vez obtenida la nata, se pasteuriza, se madura y se bate. Finalmente, el suero y los granos de mantequilla se separan para formar una masa compacta y homogénea que da lugar a la mantequilla. La verdadera mantequilla, no es fácil de untar, tiene una consistencia solida y su color amarillento puede ser más o menos intenso. En unos días, os cuento algo sobre la mantequilla con sal, ya que la receta de hoy es con la que no lleva sal.
Ingredientes (para 15 barquillos):
100 gr de harina de repostería
100 gr de azúcar glass
3 Huevos
75 gr de Mantequilla Imperial sin sal derretida
2 c/p de esencia de vainilla
2 c/p de esencia de vainilla
Colocamos una cucharada de la mezcla en la bandeja del horno (sobre papel u hoja de silicona) y con ayuda de la cuchara, repartimos muy bien, dejando una capa muy fina con forma cuadrada o rectangular.
Horneamos cinco minutos, sacamos y formamos el cilindro, hay que darse prisa, ya que enseguida deja de ser manejable y se puede partir. Y hay que tener también mucho cuidado para no quemarse. Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Quedan súper crujientes y están buenísmos solos, aunque con chocolate...están aún mejor.
Fundimos en el micro chocolate negro y decoramos los barquillos.
¡Qué pinta!
ResponderEliminarPues de sabor...deliciosos! Eso sí, para la próxima vez que los haga...tengo que comprarme unos guantes, mis deditos lo agradecerán, jeje. Besos
EliminarMe apunto la receta Carol, que tiene muy buena pinta. Siempre me han encantado los barquillos pero no tenía ni idea de cómo se hacen. Me quedo echando un vistacillo a tus recetas. Un beso!
ResponderEliminarGracias! La verdad es que están muy ricos! Besos
Eliminarqué ricos barquillos! por cierto pasa por mi blog cuando quieras a recoger un premio! un besote
ResponderEliminarhttp://lafabricaderecetas.blogspot.com.es/
Que alegría! Gracias por el premio, se me habia pasado contestarte y darte las gracias por aquí! Besos
Eliminarhttp://lasuitedelmomo.blogspot.com.es/
ResponderEliminarQue ricos y facilones que se ven. Me imagino que de sabor, serían los más. Me apunto la receta y tendré en cuenta lo de tus deditos, cuando los haga. Gracias, Un beso.
ResponderEliminarLa verdad es que si es una receta muy sencilla, y de sabor...tienes que probarlos! Besos
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